Las bolsas europeas rebotan pese al dato de inflación en la zona euro de septiembre que toca los dos dígitos, 10%, y refuerza las expectativas de otra fuerte subida de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo en octubre.

La inflación subyacente, que elimina la volatilidad de los precios de los alimentos y los combustibles y que el BCE vigila de cerca, también ha subido hasta un nuevo máximo: ha subido desde el 5,5% hasta el 6,1%.

El contexto no es positivo. Las bolsas asiáticas van a cerrar el peor mes desde el inicio del a pandemia de Covid-10. De hecho, el índice MSCI Asia Pacífico sin Japón ha bajado un 12,5% este mes, la mayor caída desde marzo de 2020.

Y de Wall Street nos queda la caída del S&P 500 que la encamina a su peor septiembre desde 2008. El Nasdaq perdió en la sesión de ayer un 2,8%, hasta casi su nivel más bajo de 2022, establecido a mediados de junio.

Además persiste el nerviosismo en el mercado de divisas y en los bonos por las declaraciones agresivas de los bancos centrales, los temores a recesión mundial y el riesgo geopolítico.

El dólar continúa fuerte y lleva a las monedas de muchos mercados a mínimos históricos lo que eleva la probabilidad de que haya más intervenciones por parte delos bancos centrales, entre ellos el de China.

Protagonistas empresariales

Adidas, Puma bajan un 3% en la apertura después de que la estadounidense Nike, el mayor fabricante de ropa deportiva del mundo, haya advertido sobre unos menores márgenes por la fortaleza del dólar y por el aumento de los descuentos. En el mercado fuera de hora ha bajado un 10%.

Los inventarios generales aumentaron un 44 % a 9700 millones de dólares al final del primer trimestre en Nike, mientras que se dispararon un 65 % en su mercado más grande de América del Norte.

Por cierto que la británica JD Sports acaba de anunciar que amplía sus vínculos con Nike con un acuerdo que brinda a sus clientes acceso a más calzado y ropa de la marca estadounidense.

Atención a las empresas de semiconductores después de conocerse que la producción de chips en Corea del Sur ha caído en agosto por primera vez en más de cuatro años. Una señal de que los fabricantes de chips se preparan para una desaceleración de la demanda mundial. La caída ha sido de un 1,7% en agosto, un fuerte contraste con el aumento del 17,3% de julio. Además, la estadounidense Micron Technology ha advertido sobre la debilidad de la demanda y la desaceleración de la producción de semiconductores.

En el mercado continuo, suben las acciones de Audax Renovables (+4%) que alcanza una cifra récord de ingresos de más de 1.300 millones de euros durante el primer semestre, un 91% más. Para Solaria (-2%), Berenberg corta su precio objetivo desde 24 a 21,5 euros.