El Plan de Inversión Extraordinaria de Carreteras (PIC) supondrá una inversión de 5.000 millones para mejorar diferentes aspectos de la red de carreteras española. El plan contempla la construcción de más de 2.000 kilómetros de carretera, con el objetivo de facilitar los traslados de los turistas, y generará 189.200 empleos según las previsiones del ejecutivo.


Los 5.000 millones se emplearán en completar la red de carreteras transeuropea, corregir y minimizar los cuellos de botella y mejorar y "adaptar las autovías a las nuevas normativas de siniestralidad ruido y emisiones de CO2", así como a garantizar la conservación de los proyectos una vez estos hayan terminado. Solo la fase de conservación generará unos 39.200 empleos entre directos, indirectos e inducidos.


El PIC combinará inversión pública y privada, lo que en palabras del presidente "ayudará a cumplir el doble objetivo de invertir en carreteras y cumplir los objetivos de los presupuestos". El presidente también explica que las inversiones en infraestructuras tienen un alto retorno, en concreto el plan PIC supondrá un retorno fiscal de 3.000 millones de euros.


Nos encontramos en un buen momento para una inversión de este tamaño en infraestructuras por, en palabras de Rajoy, los "excepcionalmente" bajos tipos de interés, la garantía  de financiación europea y la "cobertura adicional" que pueda otorgar el Plan Juncker. Afirma también que el plan "dará consistencia a la pujante recuperación económica" que España está viviendo en los últimos años.