La deuda pública del Reino Unido alcanzó el pasado mes de julio los 2,04 billones de libras esterlinas (2,23 billones de euros) y elevó la ratio de deuda respecto del PIB al 100,5%.

“La pandemia del coronavirus ha tenido un impacto sin precedentes en el déficit”. Así lo ha reconocido la oficina estadística británica.

En el mes de julio, el déficit público alcanzó los 26.700 millones de libras (29.782 millones de euros), por debajo del desequilibrio negativo de 29.500 millones de libras en el mes de junio.

Esto supone el cuarto mayor déficit mensual de toda la serie histórica, que se remonta a 1993.

En los cuatro primeros meses, el ejercicio fiscal 2020-21, que comenzó en abril, supuso el ascenso del déficit público de Reino Unido hasta los 150.500 millones de libras, lo que representa un incremento de 128.400 millones de libras respecto del mismo periodo de 2019.

La economía británica, la segunda mayor de Europa, sufrió entre abril y junio un desplome histórico de la actividad con una caída del 20,4% del producto interior bruto (PIB) respecto de los tres meses anteriores, cuando había registrado una contracción del 2,2%, confirmando así su entrada en recesión por primera vez desde 2009.

Gravedad de la situación

De este modo, el desplome de la economía británica es el mayor entre las economías desarrolladas a raíz de la pandemia, superando la caída del 18,5% del PIB de España, así como los descensos del 13,8% en Francia y del 12,4% en Italia.

Ante la gravedad de la situación, el ministro británico de Economía, Rishi Sunak, señala que la crisis ha presionado de "manera significativa" las finanzas públicas y han tenido que tomar medidas "para apoyar a millones de empleos, empresas y sustentos".

"Sin ese apoyo, las cosas hubieran estado mucho peor. Las cifras de hoy suponen un fuerte recordatorio de que tenemos, con el tiempo, que situar nuestras finanzas públicas en una posición sostenible, lo que requerirá adoptar decisiones difíciles", añadió el titular de Economía.