La vuelta a la normalidad, si miramos al mundo empresarial, está lejos de ser una realidad. Autónomos y pequeños comercios quieren volver al trabajo pero con las restricciones de movilidad su negocio tendrá un nivel de ingresos muy inferior, con prácticamente los mismos gastos.

Cuando comenzaba a abrir el pequeño comercio, apenas abrieron un 20% de ellos. Un porcentaje que se elevaba hasta el 50% en el caso de las peluquerías.

Ahora, en aquellas partes de España que ya están en la fase 1 de la desescalada, también pueden abrir terrazas de bares al 50% de su ocupación. Se quejan de que así, su negocio no es rentable.

Según datos de ATA, la Asociación de Trabajadores Autónomos, sumando los comercios que podían abrir su negocio en las dos diferentes fases han abierto sus puertas entre el 40% y el 42% del total.

Pero también se ha visto que muchas de ellas no consiguen cumplir con los requisitos (por ejemplo asegurar la distancia de dos metros entre mesas) y han tenido que cerrar hasta que consigan adaptarse.

Para César Fernández, presidente de ISBIF, Instituto Superior de Bolsa Inversión y Finanzas, el Gobierno debería hacer un plan en el que se de verdad se tengan en cuenta los costes reales que van a tener estos negocios y asegurar que su reapertura se rentable.

La reapertura de los negocios no es rentable para muchos

Lo hablamos con César Fernández, presidente de ISBIF, Instituto Superior de Bolsa Inversión y Finanzas y Celia Ferrero, vicepresidenta ejecutiva de ATA

A ello se suma que las ayudas no terminan de llegar. Las polémicas en torno a los créditos del ICO están siendo sonadas. Algunos datos apuntan a que solo se han concedido el 40%, como explicaba en Capital Radio José Ignacio Gutiérrez, vicesecretario general de la Confederación de Cuadros y Profesionales y presidente de la Federación de Servicios Financieros.

Celia Ferrero, vicepresidenta de ATA, explica que los autónomos lo están teniendo muy difícil, porque “ni siquiera nos dejan endeudarnos”. Los afectados también se quejan de la excesiva burocracia a la hora de solicitar la financiación.

La ministra de economía, Nadia Calviño, señalaba este miércoles que se han concedido y ejecutado 318.000 operaciones. Según señalaba, el 98% han sido para pymes y autónomos.

Pero hay hasta 600.000 autónomos que siguen esperando una respuesta, según datos de ATA. Y ya habría 300.000 operaciones que han sido rechazadas.

Incluso desde el Gobierno la vicepresidenta Carmen Calvo, reconocía el "lío" que hay con estos créditos, que no termina de llegar a los que los necesitan.

Desciende el número de autónomos

Y mientras, se están perdiendo cotizantes. Durante el primer cuatrimestre del año, el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) ha perdido 61.501 cotizantes, lo que supone un descenso del 1,9%.

En el mismo periodo de 2019, el RETA sumó 9.949 trabajadores por cuenta propia, según recoge un informe realizado por la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos, ATA, a partir de los datos facilitados por la Seguridad Social.

En concreto, se ha pasado de más de 3.267.000 en diciembre de 2019 a algo más de 3.200.000 trabajadores autónomos en abril de 2020.