El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri se ha referido a la privatización de la entidad. Insiste que es el Estado, accionista mayoritario de ambas entidades a través del FROB, el que tiene que decidir el momento de la privatización total o parcial, pero dejó la puerta abierta a que quizá se venda otro paquete accionarial de Bankia este año. Un presidente que se ha mostrado a favor, dice, de la privatización.

Por otro lado tras la fusión con BMN, asegura que aún es pronto para hablar de los efectos que tendrá la fusión en la plantilla o en la red de oficinas de esta entidad. El directivo explica que el precio acordado por Bankia y Banco Mare Nostrum para fusionarse es "razonable" y rechaza que se pueda comparar esta oferta con la que se recibió con anterioridad por el banco absorbido. Entre otros mensajes, explica que la fusión no va a impactar en la política de dividendos de Bankia.

Bankia, el cuarto prestamista del país


El acuerdo de integración de Bankia y Banco Mare Nostrum, supone el último movimiento de concentración del sistema financiero español y permitirá recuperar parte de las ayudas públicas del Estado. El grupo unido debe 19.600 millones de euros. 18.000 millones Bankia y 1.600 BMN.

El Estado, a través del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), ya había apostado en marzo de este año por la fusión de las dos nacionalizadas, en las que tiene un 65 % de participaciones.

El resultado de la integración será un gigante que tendrá 230.000 millones de euros en activos, más de 2.500 oficinas y 17.350 empleados en España.

Se trata de una absorción, dado el tamaño de Bankia, cuyos activos, próximos a los 190.000 millones de euros superan con creces los 40.000 millones de BMN.

El Banco Mare Nostrum (BMN), integrado por las redes comerciales de Caja Murcia, Caja Granada y la balear Sa Nostra, es la sexta entidad del país por número de activos y cuenta con amplia presencia en la zona del Mediterráneo.