El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha presentado el "Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Economía Española". Se trata de un programa de medidas para luchar contra la crisis provocada por la pandemia, con los 140.000 millones de euros de los fondos europeos autorizados en julio por la Unión Europea.

Aunque Sánchez ya ha anticipado que la mayor parte de esa cuantía «se concentrará» en los tres próximos años, esto es, en lo que queda de legislatura. Prevé que con este plan se creen 800.000 empleos, ¿son unas cifras creíbles?

Emilio González, profesor de Economía en la Universidad de Comillas, explica que "crear 800.000 empleos no es fácil" y que hay que tener en cuenta en qué sectores se han destruido más puestos de trabajo. Se trata de sectores como la hostelería o el turismo, de baja cualificación.

"Sin inversión en educación y planes de reinserción laboral no se crearán esos 800.000 empleos"

Hablamos con Emilio González, profesor de Economía en la Universidad de Comillas, sobre el Plan de Recuperación que ha anunciado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez

Por otra parte, los fondos que va a otorgar la Unión Europea a los estados miembros se enfocan a la transformación digital y la eficiencia energética, unos sectores que requieren formación específica.

Es decir, que para poder crear esos puestos de trabajo que ha prometido Pedro Sánchez haría falta un plan de inversión en educación y políticas de reinserción laboral. "Si eso existe, sí se crearán esos empleos. Si no, no se van a crear".

Por eso el profesor de la Universidad de Comillas explica que los fondos europeos por sí solos no resuelven nada, "alguien tiene que poner financiación en España", y eso serían las empresas. "La cuestión es si las empresas van a querer poner dinero, con el clima político y económico que hay".

Bruselas debe dar el visto bueno a los presupuestos de Sánchez

El experto recuerda también que no está garantizado que Bruselas apruebe el plan de presupuestos del Gobierno español, que recoge un aumento del gasto público del 56%, "con una economía que ha caído tanto como ha caído y que significa disparar el endeudamiento hasta niveles de alto riesgo".