Esta semana los Máximos Twittóricos giran en torno al Gobierno: los 'líos' lingüísticos de las ministras sobre el coronavirus y Pedro Sánchez, el anti-midas empresarial: todo lo que toca -toda empresa que menciona en su Twitter- se va de España.

Máximos Twittóricos: Sánchez, el anti-midas empresarial, y los 'líos' de las ministras con el covid

Las ministras y el coronavirus

Esta semana el Congreso nos ha dejado uno de los momentos más graciosos desde la época 'rajoyana'. Espinosa de los Monteros le preguntaba a Carmen Calvo si el "Gobierno piensa hacer algo por restituir credibilidad de las instituciones del Estado". "No hay que restituir lo que no ha existido", responde Calvo.

Después de varios segundos de silencio -que parecen hacerse eternos- la bancada socialista rompe a aplaudir y los de Vox estallan a carcajadas.

Pero este no es el único 'lío' lingüístico que han sufrido las ministras del Ejecutivo. María Jesús Montero dijo que "la pandemia no entiende de virus" y Yolanda Díaz repitió en infinidad de ocasiones en tan solo unos minutos "a ver si sé explicarlo" cuando trataba de informar sobre cómo alguien en ERTE no es un parado.

El anti-midas

Y no dejamos el Gobierno porque esta semana Pedro Sánchez ha vuelto a ser el rey midas, pero al revés. Toda empresa que toca, o más bien menciona en Twitter, se va de España.

Primero fue con Nissan, cuando en enero dijo que “el mantenimeinto de la planta de Nissan en Barcelona estaba garantizado”. Meses después, Nissan se "olvidó" de la supuesta promesa que le hizo a Pedro Sánchez y dijo “bye bye” a la planta barcelonesa.

Esta semana ha sido Airbus. El pasado martes Pedro Sánchez escribía lo siguiente en su Twitter.

Un futuro muy efímero, parece ser. De hecho, de tan solo unas horas. Porque el día siguiente, el miércoles, Airbus elevó los despidos anunciados en su división de Defensa y Espacio en España desde los 630 afectados a 722.

La dececpión de Trump por culpa de las redes

Y como cada semana, también reservamos un espacio de Máximos Twittóricos para el hombre de los mercados, el hombre de Twitter: Donald Trump. Esta semana el presidente y su gran ego estaban pletóricos del mitin que tenía el pasado fin de semana que incluso llegó a presumir de que habían recibido más de un millón de solicitudes de entradas para un pabellón de 19.000 personas.

Estaban tan motivados que decidieron entonces levantar un escenario exterior para que el presidente pudiese dirigirse también a las masas que no habían logrado entrar en el recinto. Pero al final, a Trump lo trolearon. De las 19.000 personas que tenían de aforo, solo acudieron 6.000.

Evidentemente, lo del escenario exterior se tuvo que suspender. Y es que hubo un extraño crossover para ir contra Trump: los fans del K POP, el pop coreano, y los usuarios de Tik Tok unieron sus fuerzas y sacaron miles de entradas para después no presentarse al mitin y que apareciera medio vacío.