El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pide 6,8 billones de dólares para alcanzar sus objetivos presupuestarios. Su propuesta incrementa un 10% el gasto público. Modifica la política de subvenciones que trajo la pandemia, sube los impuestos a las grandes fortunas y se fija como objetivo económico prioritario reducir el déficit en tres billones de dólares en una década.

Examinamos al detalle el presupuesto Biden y el impacto económico que genera con Carlota García Encina, investigadora principal de EEUU y Relaciones Transatlánticas del Real Instituto Elcano.

En el siguiente podcast, puedes escuchar al completo la Entrevista Capital de Luis Vicente Muñoz en 'Capital, La Bolsa y La Vida'.

Carlota García Encina: "El Presupuesto Biden no va a prosperar en un Congreso dividido"

Examinamos al detalle el Presupuesto Biden y el impacto económico que genera con la investigadora principal de EEUU y Relaciones Transatlánticas del Real Instituto Elcano.

"En Estados Unidos se ve más como un documento político"

De 5,8 billones de dólares en el año fiscal 20-23 a 6,8 para el siguiente periodo. "Es lo que se esperaba", reconoce García Encina. No deja de ser una propuesta que no tiene por qué llegar a aprobarse. De hecho, en el país el plan se percibe más como el pistoletazo de salida electoral del presidente Biden.

El plan presupuestario de su Administración confía en la solidez de la economía norteamericana y en seguir recortando la inflación. Hasta el punto que las previsiones de crecimiento del Gobierno son superiores a las de otros organismos, como apunta Carlota García.

Sin embargo, no podemos olvidar que algunas de las leyes económicas de Biden pueden generar fricciones con estamentos internacionales:

"Muchas de las subvenciones pueden ir en contra de la Organización Mundial del Comercio. Para los europeos es un problema. Hay un miedo a que muchas empresas se vayan a Estados Unidos por la inyección brutal que va a haber con esta ley"

Y es que la Administración prevé "seguir gastando mucho". Por ello, esa reducción de déficit marcada como objetivo se quiere alcanzar mediante impuestos, pero no por una rebaja del gasto público.

No obstante, García Encina subraya que el Presupuesto Biden no saldrá adelante en un Congreso fragmentado tras las elecciones del pasado año. Y añade que los republicanos harán su propia propuesta "en breve".