Las fiestas navideñas, sus compras y las reuniones familiares están llegando a su fin. ¿Año nuevo, ropa nueva? Enero se abre camino y con él también su famosa campaña de rebajas. Aunque, ciertamente, los periodos de rebajas viven un non-stop. Venimos de un mes de noviembre que arrancó con el dia de los solteros, siguió con el black friday, el cybermonday y, ahora, llegan las rebajas de enero, a las que se sumarán posibles descuentos en febrero por el día de San Valentin.

Analizamos este tipo de promociones que nos asaltan cada vez con mayor frecuencia, con la ayuda de Gaietà García, profesor de EAEBusiness School, quien asegura que "vivimos en una promoción continua”.

Las rebajas de enero ya no son lo que eran: ¿culpa del Black Friday?

¿Tienen las rebajas tanto fuelle como antes? La multitud de ofertas y promociones continuas provocan que la compra de productos y servicios no cese prácticamente en todo el año, ¿afecta esto al periodo tradicional de rebajas?

Algunas marcas han comenzado ya a ofrecer descuentos, lo que muchos podrán aprovechar para sus últimas compras navideñas. Otras compañías darán ese pistoletazo de salida a partir de la noche de Reyes.

En cualquier caso, los españoles gastarán de media más de 200 euros por cabeza, según un estudio elaborado por el servicio de banca móvil Bnext. Esto es casi cuatro veces más que lo que gastamos el año pasado, cuando el presupuesto de cada español en rebajas rondó los 60 euros. ¿Ha llegado realmente la cuesta de enero?

Las rebajas se han "desnaturalizado"

García cree que este fenómeno "se ha desnaturalizado con el paso de los años", porque "hemos anticipado" los gastos. Aunque el profesor de EAE Business School destaca un "efecto positivo" para vendedores y fabricantes, desde el punto de vista logístico, productivo y de creación de empleo.

Eso sí, siempre y cuando las ofertas y promociones se lancen de forma "gradual" y "constante". De lo contrario, las rebajas podrían llegar a causar problemas de adaptación de la oferta y demanda, advierte García.

Y lógicamente si compramos más, el incremento en gasto se verá reflejado en un aumento de las ventas para los comerciantes, que estiman una subida del 2% para esta temporada de rebajas.

La venta por Internet favorece cierto anonimato

Con respecto al hábito de consumo, los españoles hemos pasado de colapsar tiendas a colapsar los servidores de las páginas web de nuestras marcas favoritas. Y esto tiene un añadido, alerta García.

El experto ve una mayor dificultad a la hora de cuantificar las ventas que se van a producir, lo que conduce a su vez a una pérdida de información. García destaca asimismo que el comercio online es "una puerta para el consumo que proporciona cierto anonimato", pues los ciudadanos tienen la posibilidad de comprar desde sus casas sin que nadie sepa qué productos ha incluido en su cesta de la compra.