Lo de esta semana ha sido un bodevil. Que si líos entre la patronal con los sindicatos y el Gobierno porque se aprueban pactos sin acuerdo, lo que viene a ser el antónimo de pacto, pero vamos a arrancar con un descubrimiento; ni Colón con América hizo tanto por el mundo como lo de Casado con el sol de esta semana... atentos a la premisa: por la noche, no sale el sol.

Escucha el resumen semanal completo en este podcast de El Balance:

Claves Economía | El Balance [19.11.2021]

Lo de esta semana ha sido un bodevil.   Que si líos entre la patronal con los sindicatos y el Gobierno porque se aprueban pactos sin acuerdo, lo que viene a ser el antónimo de pacto,  pero vamos a arrancar con un descubrimiento; ni Colón con América hizo tanto por el mundo como lo de Casado con el sol de esta semana... atentos a la premisa: por la noche, no sale el sol.

De día sale el sol, de noche, la maligna luna acaba con el astro rey hasta la mañana siguiente. El problema de todo esto, según Casado, es que la izquierda está obsesionada con la energía solar. ¿Qué ocurre entonces cuando no hay luz del sol? Cuando el astro rey amarillo deja de brillar lo que ocurre es que se hace de noche y entonces no hay luz y da miedo salir a la calle.

A eso de las ocho, dice el líder de la oposición, Pablo Casado, el sol se esconde (eso de media, imagínense durante el invierno… otoño que para las cinco de la tarde… ya va cayendo la luz).

E imagínense que aquí, dentro de lo malo, no estamos en lo peor. Los británicos, a las cuatro, de noche. A casa, sin sol y, por supuesto sin energía solar que poder producir. ¿Por eso se rinden? No, son unos valientes. ¿Entonces?… qué hacemos nosotros: a ver, al señor presidente del Partido Popular no le falta razón, pero el mensaje no está claro. ¿Tiene España capacidad para almacenar tanta energía solar como para poder suplir las horas de oscuridad?

A ver, los datos: la solar fotovoltaica suministra a veces más del 20% de la electricidad consumida en España durante el día. Sin embargo, durante la noche NO funciona. Ocurre lo mismo con la eólica si no hay viento.

Hay dos opciones: almacenar la energía o apoyarse en otras tecnologías. La realidad es que para conseguir una solución de almacenamiento a gran escala y a largo plazo se necesitan billones de euros de inversión en I+D. Y aquí he detectado 4 líneas de investigación: baterías (no hay solución viable), agua (limitaciones… no podemos tener un embalse en cada esquina), combustibles (tienen que ser verdes y se necesita dinero) y calor (eso es lo más factible).

Luego… la ausencia de almacenamiento a gran escala impide que las renovables intermitentes sean la única solución. Necesitamos otras tecnologías: térmicas (gas, carbón) o nuclear.

Pero claro… en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (con el que Bruselas nos ha dado los 140.000 millones en fondos europeos) en el componente siete dice que hay que aumentar la aportación de las renovables hasta el 40% del consumo de la energía en España.

¿Se ha hecho este cálculo teniendo en cuenta que el sol, como dice certeramente Pablo Casado, no sale por la noche?

Y por eso, para conocer si los planes del Gobierno contemplan esta premisa, nos hemos puesto en contacto (esto es verídico) con el Ministerio para la Transición Ecológica.

Porque el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, en su apartado siete contempla que para 2030 el 40% del consumo de electricidad de España provenga de renovables, en su mayor parte, del sol, Y claro… ¿qué vamos a hacer si durante la mitad del día estamos que no estamos con esto de la luz.

Bien… desde Transición Ecológica nos aseguran que el crecimiento previsto en renovables, recogido en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima quiere cumplir los objetivos de energía y clima de la Unión Europea… que cuenta con el aval del operador del sistema eléctrico, descartando cualquier riesgo para el suministro (concretamente, su Anexo D), y fue considerado una “sólida base” para la recuperación por la Comisión Europea.

¿Quién había aprobado esto? La UE decimos, bien, pues en Capital Radio contactamos con la Comisaria de Energía en Bruselas.

Aquí nos dicen que no entran a valorar mensajes de terceros políticos y que los planes de España están en consonancia con lo que en Europa se considera “adecuado” para la protección del planeta.

Pactos y desacuerdos

Esta semana el Gobierno saca adelante un pacto más porque se podría decir que tras muchos esfuerzos el Gobierno ha sacado adelante el primer tramo de la reforma de las pensiones, la que contempla el famoso mecanismo de equidad intergeneracional.

Implica un aumento de las cotizaciones actuales del 0,6% desde 2023 y hasta 2032. El 0,5% del pago lo tendrán que asumir los empresarios. Los trabajadores el 0,1% restante.

Un mecanismo contingente temporal limitado. En castellano: que le vamos a subir las cotizaciones durante un tiempo (nada más que diez años y luego ya veremos) porque tenemos que llenar una hucha de dinero público para pagar las pensiones (que cada vez serán más) que la tenemos temblando.

Los sindicatos, contentos porque quien más sufre con la modificación son los empresarios. Estos últimos, enfadados, porque dicen que vale… van a pagar más, pues contratarán menos.

A falta de mes y medio para que concluya el año, y con él el tiempo límite para acordar el nuevo marco de relaciones laborales, el foco principal de la negociación entre el Gobierno y los agentes sociales continúa fijo sobre la temporalidad. Una situación con la que desde Bruselas quieren que acabemos, y que es la firme intención de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.

El Ejecutivo propone que los contratos de duración determinada queden enmarcados únicamente en dos situaciones: en circunstancias ocasionales por el aumento inesperado de la producción, y para cubrir la baja de otro trabajador. Para la primera de las variables, la duración máxima del contrato eventual sería de tres meses. La idea, que ha sido remitida junto con nueva documentación en la que se abordan otros apartados de la reforma, será valorada por los agentes sociales.