Aena cerró el ejercicio 2017 con un beneficio neto consolidado de 1.232 millones de euros, supone un incremento del 5,8% con respecto a los 1.164 millones de euros obtenidos el año anterior.


Un dato muy significativo ya que en 2016 se recogió el impacto extraordinario positivo de las reversiones de provisiones por procedimientos judiciales vinculadas con las expropiaciones de terrenos en el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas. Por lo que si se excluyen estos efectos extraordinarios, el beneficio neto de la gestora aumenta un 21,9%.


Los aeropuertos de Aena cerraron 2017 alcanzando casi los 250 millones de pasajeros, un 8,2% más que en el año anterior. Se trata del mejor año de su historia, con 19 millones de pasajeros más que en 2016. De esta manera, supera el récord alcanzado en 2007 antes de la crisis (210,4 millones de viajeros).


Los aeropuertos españoles contribuyen a estas cifras en un 70% en el caso del tráfico internacional y un 30% en el caso del nacional. El volumen de viajeros internacionales ha aumentado en un 8,4% y en el caso del tráfico domestico este ha aumentado un 8,1%.


De cara a 2018, Aena estima un crecimiento del volumen de pasajeros en la red de aeropuertos de España en torno al 5,5%.


Durante 2017, los ingresos consolidados ascendieron a 4.027,6 millones de euros, un 6,8% más que en 2016. De esta cifra, el 26,3% corresponde a ingresos comerciales, que crecen un 11,3% en 2017, hasta superar los 1.060 millones de euros.


En el caso del resultado bruto de explotación (Ebitda), este fue de 2.517,4 millones de euros, una mejora del 9,8% respecto al ejercicio de 2016. El resultado de explotación, por su parte, aumentó un casi un 17%, hasta los 1.717 millones de euros.


Por el lado de los costes, el gasto de personal se elevó un 6,6%, hasta los 417 millones de euros durante 2017, para una plantilla media de 8.174 trabajadores, un 2,6% más respecto al ejercicio anterior.


Durante el pasado ejercicio, el gestor aeroportuario logró incrementar en un 9,8% la generación de caja de la compañía, que alcanza los 2.014,6 millones de euros, frente a los 1.834,7 millones de un año antes.


Como consecuencia de ello, Aena ha logrado reducir su deuda financiera neta consolidada hasta los 7.156 millones de euros, lo que supone un descenso del 13% frente a la contabilizada en 2016 (8.228 millones de euros).


El consejo de administración de Aena ha acordado proponer en junta de accionistas el pago de un dividendo de 6,5 euros brutos, con cargo a estas cuentas anuales de 2017, lo que supone distribuir el 80% del beneficio neto del ejercicio. Este dividendo es un 69,7% más alto que el abonado el pasado año (3,83 euros brutos por título).