"Nos da mal augurio la decisión del Tribunal Supremo" de estudiar si confirma la decisión de imponer el impuesto de hipotecas a la banca, explica José María Mollinedo, secretario general de los Técnicos de Hacienda, Gestha. "Nos hace temer que el Pleno del Tribunal Supremo pueda cambiar la doctrina y aporte más confusión a los ciudadanos", dice.



Un día después de que cambiara el criterio sobre quién debe hacerse cargo de uno de los gastos de las hipotecas españolas, el Tribunal Supremo va a reunir a un Pleno compuesto por más de 30 magistrados para decidir si la sentencia sobre el Impuesto de actos jurídicos documentados creará jurisprudencia.

En un comunicado, el presidente de la Sala Tercera del alto tribunal, que se encarga del ámbito de lo Contencioso-Administrativo, dice que el Pleno de la Sala tendrá que "decidir si dicho giro jurisprudencial debe ser o no confirmado".

El jueves, el Tribunal Supremo determinó en una sentencia que deben ser los bancos, y no los clientes, los que deben abonar los impuestos sobre actos jurídicos documentados por la constitución de hipotecas, asestando un nuevo golpe a las entidades españolas, que cayeron en bloque en bolsa ante la posibilidad de un aluvión de reclamaciones.

En el comunicado, el presidente de esta sala, Luis María Díez-Picazo, deja en suspenso los procesos relativos a este asunto, justificando estas medidas de carácter urgente por la "enorme repercusión económica y social" que supone el "giro radical" del criterio jurisprudencial.

Tras este cambio de decisión, los bancos dan un giro en Bolsa y suben en el entorno de un 1%. Tras conocerse la sentencia ayer, los seis bancos del Ibex 35 llegaron a perder cerca de 5.500 millones de euros de capitalización bursátil en una sola jornada.