Amazon lo ha vuelto a hacer. Su expansión por distintos sectores es imparable y ahora ha puesto en jaque a los proveedores tradicionales de belleza.

La amenaza tiene nombre: Amazon Professional Beauty Store, una nueva sección dentro de Amazon.com con la que el gigante del e-commerce venderá productos de belleza a profesionales del sector, como estilistas, peluqueros y esteticistas. Una declaración de guerra a los proveedores tradicionales.

Porque mientras que el consumidor promedio compra este tipo de productos a minoristas como Sephora o Ulta, el mundo de los proveedores de belleza profesional está más fragmentado. Suenan algunos nombres de grandes minoristas online como Sally Beauty o Beauty Depot, que ya se echan las manos a la cabeza, puesto que es probable que todas estas tiendas se vean afectadas por este nuevo servicio de Amazon, que promete precios competitivos y entregas rápidas a través de Amazon Prime.

De hecho, la reacción no se ha hecho esperar. Amazon anunció el lanzamiento este lunes pocas horas antes del cierre de Wall Street y los efectos fueron casi inmediatos, con caídas del 17% para las acciones de Sally Beauty o del 3% para Ulta Beauty.

A través de este servicio, Amazon venderá productos de marcas profesionales como OPI o Wella, que abundan en los salones de belleza locales. Los clientes deberán enviar sus credenciales a Amazon antes de poder acceder a la tienda, para demostrar que son clientes profesionales.

Estos proveedores de belleza son los últimos en sufrir los movimientos del gigante del e-commerce hacia una serie de nichos o mercados más regulados. El año pasado, las cadenas de farmacias de EEUU y los mayoristas de medicamentos como CVS, Walgreen y McKesson perdieron miles de millones en valor de mercado cuando Amazon dio su primer paso hacia la farmacia online.

La estrategia de Amazon es difícil de combatir, puesto que aprovecha su escala y perfil online para ofrecer una gama más amplia de productos a precios más bajos, lo que ejerce presión sobre los márgenes de los jugadores que hay en el tablero.

Y en el sector de la belleza ocurre igual: actualmente, los estilistas suelen viajar a distintas ubicaciones de proveedores de cosmetología para obtener los suministros necesarios. Ahora, Amazon les ahorrará el viaje, ya que las marcas podrán llevar directamente a su plataforma sus mejores ofertas de productos. Amazon le vuelve a robar el almuerzo a otro sector.