El Gobierno portugués aprueba una propuesta de ley que legaliza las plataformas de transporte como Uber o la española Cabify

Hasta ahora operaban en el país en un vacío legal. Lo denomina "transporte de pasajeros en vehículos ordinarios", considera el Ejecutivo de Antonio Costa que no es un servicio público, pero que, por su relevancia social, debe tener un conjunto de reglas que aseguren los derechos de los consumidores: "El TVDE comprende una actividad privada, desvinculada de un régimen de servicio público, pero que, por su creciente relevancia social, debe quedar sometida a un conjunto de reglas que aseguren los derechos de los consumidores", recoge el comunicado del consejo de ministros.

La regulación de esta actividad se diferencia además de la que rige al sector del taxi "ya que se trata de servicios organizados según lógicas diferentes, satisfaciendo públicos y necesidades que, en amplia medida, se diferencian de forma clara".

Establece un horario máximo de conducción de seis horas seguidas, los conductores deberán recibir formación y los vehículos no podrán tener más de siete años de antigüedad.

La legalización de plataformas como Uber y Cabify, las únicas de este tipo que por ahora operan en Portugal, ha sido duramente contestada por el sector del taxi en los últimos meses, con varias huelgas en protesta por la "competencia desleal" de estos servicios.

El anterior Gobierno luso llegó a declarar que Uber era "ilegal" y una sentencia judicial de 2015 obligó a la empresa a suspender su funcionamiento en Portugal, aunque siguió operando después de presentar un recurso a la decisión.