La presidenta del Banco Santander, Ana Botín, en su discurso en la junta de accionistas ha hecho referencia al inicio de la campaña electoral en España y ha pedido a los políticos que alcancen “un pacto por el crecimiento inclusivo”. Les ha pedido que huyan del cortoplacismo y que impulsen una agenda reformista con visión de largo plazo, que fomente la cohesión social. “El objetivo no es sólo crecer, sino que los beneficios del crecimiento económico lleguen a todo el mundo”, ha señalado. Esto sólo es posible si los empresarios invierten y crean empleo.

Para respaldar el crecimiento inclusivo, Botín ha pedido “un compromiso permanente con la educación”, porque “necesitamos una educación de primer nivel. Ésta tiene que ser una prioridad, gane quien gane o gobierne quien gobierne”.

Ana Botín ha señalado que serán necesarios acuerdos entre los distintos partidos y aseguró que, en política económica, “todos sabemos lo que funciona y, sobre todo, lo que no funciona”. Como aspectos prioritarios ha citado la sostenibilidad presupuestaria, un entorno que apoye a los emprendedores y a los inversores para que creen puestos de trabajo, que las pensiones de los trabajadores sean suficientes para tener una vida digna pero que, a su vez, sean sostenibles. Por último, reclamó estabilidad institucional para atraer inversión nacional y extranjera.

La presidenta de Santander se ha referido al “brexit” como ejemplo de los peligros que, a su juicio, pueden venir si se ignoran las preocupaciones de millones de personas sobre sus trabajos y sobre su futuro. Y ha dejado otra de las frases más sonoras de la mañana “El brexit es nuestro canario en la mina”

Botín cree que España debe recuperar el protagonismo en la construcción europea, “construir Europa es política nacional. Europa es la solución y no el problema”. Para Ana Botín, “esto no será posible sin un sector financiero fuerte y rentable”, y recordó que “en Europa, un 90% del crédito a pymes concedido por el sector privado viene de los bancos, que son esenciales para lograr que Europa siga siendo un área de prosperidad y crecimiento sostenible”.

En este sentido, ha abogado por completar la unión bancaria para romper el vínculo entre riesgo soberano y sector financiero y contar con una regulación equilibrada entre la prudencia y el acceso de las empresas al crédito y a proyectos de futuro solventes.