Una semana esta que (por fin) cerramos con una espía menos que hace siete días, con líos de siglas, de quiero y no quiero estar en tu grupo y para rematar fotografiamos lo que puede ser nuestro fin, un agujero negro en el centro de la Vía Láctea.

Una semana en la que mejor no nos hubiéramos levantado.

Escucha el resumen semanal completo en este podcast de El Balance:

Claves Economía | El Balance [13.05.2022]

Una semana esta que (por fin) cerramos con una espía menos que hace siete días, con líos de siglas, de quiero y no quiero estar en tu grupo y para rematar fotografiamos lo que puede ser nuestro fin, un agujero negro en el centro de la Vía Láctea. Una semana en la que mejor no nos hubiéramos levantado.

La semana arrancó con buenas noticias, la victoria de Carlos Alcaraz ante el alemán Alexander Zverev en el Mutua Madrid Open de Madrid. Un español que consiguió lo impensable, hacer corta una final de tenis; un español que batió en la tierra batida madrileña a Noak Djokovic y Rafael Nadal quien, por cierto, ya está un poco harto de comparaciones.

Carlos Alcaraz, que ahora está en el másters 1000 de Roma, nos trajo las buenas sensaciones que la política y la economía nos quitan de un plumazo.

Y no es para menos porque esta semana vuelve el espía de cabecera de El Balance , el agente 007 que trata de batir a los enemigos. Pegasus es su nombre. Paz Esteban, al parecer, su enemiga.

La superespía’, la jefa de los espías españoles que esta semana ha sido fulminantemente despedida. Es lo que dice el Boletín Oficial del Estado aunque su exjefa, la ministra de Defensa, Margarita Robles insiste en que aquí no ha habido destitución que ha sido una sustitución.

Paz Esteban, la mujer a la que ya no quiere el sistema mientras que así sucesora Esperanza Cateleiro, que el jueves juraba cargo, se la califica como “pura continuidad”. De hecho, Margarita Robles estaba pletórica con su nombramiento.

Lo apoyaba al 100% por defender a España. ¿De quién? No lo sabemos. Porque sospechamos de Marruecos, pero no podemos decirlo, porque con Rabat hemos pactado que el martes, tras dos años y medio cerradas, vamos a reabrir las fronteras de Ceuta y Melilla por la pandemia.

Porque no queremos que Marruecos nos vuelva a abrir el grifo de la inmigración. Porque no queremos que se nos enfade Mohammed VI.

Pero es que entonces no sabemos explicar quién ha podido ser. Los independentistas catalanes, a los que en un principio se quiso acusar por la propia Margarita Robles va a ser que no y desde estas filas, el líder de ERC en el Congreso de los Diputados, Gabriel Rufián, más bien que se ríe ante esta posibilidad.

El caso es que por la destitución ha habido lío.

La seguridad nacional se salva

Y a todo esto, in extremis, en el Congreso de los Diputados, sus señorías van y aprueban la reforma de la ley de seguridad nacional y otras cuatro normas que pocos saben cuáles son.

Hay discrepancias, pero el Partido Popular ha aprobado un texto que habla de las cláusulas de la reforma la que permite requisar temporalmente bienes y movilizar a cualquier ciudadano mayor de edad en caso de declararse un estado de crisis.

Sobre otro de los aspectos principales de la reforma, la creación de una reserva estratégica de materiales para prevenir desabastecimientos en caso de crisis, como sucedió al comienzo de la pandemia, nadie puso objeciones. Y en realidad, poco se discutió sobre este asunto.

Guerra en el este...

En el frente de guerra, dos focos: Finlandia que dice que va a pedir su ingreso en la OTAN. Suecia lo hará pronto. Alkegan que después de que Vladímir Putin se haya lanzado con Ucrania no lo se ven seguros.

“Tú lo has provocado. Mírate en el espejo”. Es lo que el presidente de Finlandia, Sauli Niinistö, afirmó que le diría al presidente ruso, Vladímir Putin, si le preguntara por el ingreso de su país en la OTAN, un país con 1.340 kilómetros de frontera con Rusia e históricamente ajeno a la Alianza Atlántica.

En Helsinki hablan de ingreso “urgente” ahora que tiene el 76% del apoyo ciudadano, según las últimas encuestas. Putin responde y dice que a él no lo amenacen que se pone chungo.

La realidad es que la futura entrada de Finlandia en la OTAN dará a la Alianza Atlántica el doble de frontera con Rusia del que ahora tiene con las repúblicas bálticas y ofrecerá el mayor ejército de la zona.

Aunque mientras esperamos a los tanques, la primera respuesta de Moscú tras el avance de Helsinki hacia la Alianza Atlántica ha consistido en cortar el suministro de gas a Europa a través del gasoducto polaco Yamal. El gigante gasístico ruso Gazprom, controlado por el Kremlin, ha informado que se trata de una contramedida a las sanciones que ha impuesto la Unión Europea.

... con topes de gas

Corte de gas vía Polonia que sigue tensando el mercado eléctrico. La Comisión Europea va a proponer un tope a los precios del gas para abaratar la factura, pero mientras España ya lo hemos aprobado en Consejo de Ministros extraordinario este viernes que en el del martes nos pareció todo muy precipitado. 40 euros el megavatio hora para que la factura no se dispare.

Buenas noticias

Para cerrar vamos a hablar de una molécula, pero no cualquiera; la molécula que facilita recuperar la memoria y que nos da una buena noticia, que se configura como un paso más en la búsqueda de una cura definitiva para el alzhéimer.

Es un avance muy preliminar realizado en Estados Unidos, pero ahí está. Es una molécula que, al menos en ratones, rejuvenece los cerebros envejecidos y permite recuperar la memoria.

Y esta la buena, traigo ahora la de arena, la mala noticia, el agujero negro descubierto en el mismo centro de nuestra galaxia, la Vía Láctea.

Esta semana, hace unas horas, una red de telescopios repartida por toda la Tierra ha compuesto la primera imagen de Sagitario A*, el agujero negro supermasivo en lo que es el Madrid de nuestro sistema planetario.

La gran pregunta ahora que queda en el aire es qué hay dentro de la oscuridad del agujero. Ese horizonte de sucesos sin retorno es la gran frontera de la física conocida. En los agujeros negros conviven la teoría de la relatividad general, que describe el universo a grandes escalas, y la física cuántica, que se ocupa de las pequeñas.

Y mientras, en las películas, lo que nos dicen es que un agujero negro se traga todo lo que ve a su paso.