El partido Alianza Democrática gana las elecciones en Portugal por apenas dos escaños sobre el Partido Socialista. La izquierda lusa pasa de ostentar una mayoría absoluta a ser superada por los conservadores, aunque deberán apoyarse en la extrema derecha para conformar una mayoría suficiente.

¿Qué supone este vuelco electoral para el país? Lo analizamos desde una perspectiva económica y política con la ayuda de Raquel García Llorente, investigadora del Real Instituto Elcano especializada en Unión Europea.

Luis Montenegro y su espada de Damocles para gobernar Portugal

La victoria por la mínima de Alianza Democrática impide al líder conservador articular una mayoría en solitario. Claves con Raquel García Llorente.

¿Cómo va a gobernar Alianza Democrática?

El Partido Socialista ha dejado claro que pasará a la oposición, pero no será muleta de apoyo parlamentario para la derecha. Ante este bloqueo de los progresistas y el paupérrimo resultado del socio preferente, Iniciativa Liberal, a Alianza Democrática solo le queda la carta de la extrema derecha euroescéptica para articular mayorías con las que aprobar, por ejemplo, los presupuestos del país.

"Montenegro se encuentra en una situación complicada. Cuenta con una doble presión: consolidar un Gobierno estable y consolidar su liderazgo en el partido porque lleva muy poco tiempo"