El Banco Central Europeo (BCE) ha decidido extender hasta el 1 de enero de 2021 su recomendación a la banca de no repartir dividendos y no efectuar recompras de acciones propias para preservar el capital de las entidades, ampliando así en tres meses las actuales restricciones, en vigor desde el pasado mes de marzo, según ha comunicado el instituto emisor.

"Esta recomendación actualizada sobre la distribución de dividendos sigue siendo temporal y excepcional y tiene como objetivo preservar la capacidad de los bancos para absorber pérdidas y apoyar a la economía en este entorno de incertidumbre excepcional", ha indicado el BCE, asegurando que dará a los bancos suficiente tiempo para reponer sus reservas de capital y liquidez para no actuar procíclicamente.

En su decisión, el BCE ha destacado el elevado grado de incertidumbre, que dificulta que los bancos pronostiquen con precisión sus posiciones de capital, señalando que el análisis de vulnerabilidad realizado al sector demuestra que el nivel de capital en el sistema podría disminuir significativamente si se materializara un escenario severo.

No obstante, el BCE ha señalado que revisará si esta postura sigue siendo necesaria en el cuarto trimestre de 2020, teniendo en cuenta el entorno económico, la estabilidad del sistema financiero y la fiabilidad de la planificación del capital.

"Una vez que la incertidumbre que requiere esta recomendación temporal y excepcional disminuya, los bancos con posiciones de capital sostenibles pueden considerar reanudar los pagos de dividendos", ha apuntado el BCE, explicando que esto también se aplicará cuando estén operando por debajo del nivel de capital del Pilar 2 de Orientación (P2G), aunque como condición previa, las trayectorias de capital proyectadas de los bancos deben demostrar que sus posiciones de capital son sostenibles en el mediano plazo.

El Banco de España apoya la recomendación

El Banco de España ha extendido a las entidades financieras menos significativas, que están bajo su supervisión, las recomendaciones hechas el lunes por el BCE a los grandes bancos europeos en relación con los dividendos, los beneficios y la retribución variable a directivos en 2020.

En sendas notas, el Banco de España explica que en respuesta a la situación de incertidumbre económica generada por la pandemia provocada por la COVID-19, los supervisores y reguladores bancarios siguen prestando especial atención a las políticas de distribución de los resultados y de remuneraciones de las entidades de crédito.

En particular, a cualquier impacto que estas políticas puedan tener en el mantenimiento de una base sólida de capital.