Las principales compañías de inteligencia artificial generativa se han unido con el presidente de los Estados Unidos Joe Biden para abordar la clasificación del contenido generado por esta tecnología y no caer en las deepfakes de la inteligencia artificial.

La solución por lo pronto será aplicar una marca de agua. La gran incógnita ahora es saber si será una marca visible o detectada a través de un software.

El metaverso avanza en paralelo y España ha publicado su Libro Blanco del metaverso. Patricia Esteban, Metaverse Lead IBM y Alvaro Manzano, managing director de Accenture lo analizan con Xelena Niedbala en este podcast:

Metaverso en La Frontera [24.07.23]

¿Qué dice el primer Libro Blanco de metaverso en España? Nos lo cuentan sus creadores en Metaverso en la frontera, presentado por Xelena Niedbala. Ellos son Patricia Esteban, Metaverse Lead en IBM y Álvaro Manzano, Managing Director de Accenture.

Elon Musk mata al pájaro de Twitter

Poco se habla de ese cambio de logo y marca de Twitter. Para los que no se hayan metido todavía en la red social, sepan que Elon Musk ha matado al pájaro azul y lo ha sustituido por una X.

Y el empresario avisa, el rebranding traerá muchos más cambios en la plataforma que la simple sustitución de un logo por otro.

La actual directora ejecutiva de la compañía, Linda Yaccarino , adelanta que se trata del primer paso hacia el futuro de una red de conectividad ilimitada, de pagos y con una fuerte presencia de la IA que nos conectará de maneras inimaginables.

Japón tendrá un superordenador de IA

El Gobierno de Japón se une a los planes de la inteligencia artificial. En esta ocasión ha encargado al Instituto Nacional Avanzado de Ciencia y Tecnología (AIST), que desarrolle una supercomputadora con una capacidad superior a la de Fugaku, actualmente el segundo más potente del mundo.

Esta potente máquina podría estar lista tan pronto como el año que viene y estará a disposición de empresas locales que quieran desarrollar inteligencia artificial generativa a través de la nube. Será financiada por el ministerio japonés de Economía con 226 millones de dólares.